SOLEDAD

En la triste soledad de mi existir

sopla un viento de esperanza, de amor, de sueños de juventud,

que se realizan en el  atardecer de mi existir,

deseos acariciados, que estuvieron adormecidos

como en un letardo interminable,

y que hoy vuelven a vivir.

Que los años quedaron paralizados

por el sueño de un invierno que acaba de terminar,

que al abrir mis ojos te ven igual que ayer

que nos amamos como ayer

en esta primavera que hoy comienza con nosotros.

 

Ana Nicolau

Feb.00